Un decálogo de tips que deben adoptarse en este 2025 para reducir los efectos de la volatilidad sobre los márgenes de la compañía.
- Cobertura Natural: lo primero que se recomienda a las empresas para gestionar el riesgo cambiario es que busquen traspasarlo a clientes y/o proveedores. Concretamente, es trata de que las transacciones se realicen en la moneda funcional de tu empresa. Recién en caso de que no sea posible se aconseja utilizar derivados financieros.
- Contar con una Política de Gestión de Riesgo Cambiario, documentada y aprobada por el directorio antes empezar a utilizar derivados para gestionar el riesgo cambiario, es una buena práctica que permite alinear a la gerencia de finanzas con el directorio.
- Definir con claridad que tipo de exposición van a cubrir, así como el objetivo que persigue la estrategia de cobertura. El driver más importante debiera ser cuánto tolera el margen del negocio la volatilidad de la moneda a la cual está expuesta la empresa.
- Capacitar al equipo de finanzas en derivados para que pueda determinar qué producto es el adecuado para el objetivo de la empresa. Para ello debe entender el perfil de pago del derivado, cómo construir el pricing, y de qué manera contabilizarlo.
- Dotar al equipo de finanzas de las herramientas necesarias para negociar de igual a igual frente a los bancos, contando con market data y herramientas de valorización de derivados.
De esta manera, se evitará pagar sobreprecios en el mercado spot y forward. Xymmety es una plataforma que entrega esta información, permitiendo además automatizar funciones y disminuir el error humano.
- Contar con la visibilidad de la exposición al tipo de cambio en tiempo real. Hacer cobertura sobre la exposición de hace un par de semanas con los tipos de cambio de hoy me puede llevar a problemas mayores. Nuevamente, Xymmetry permite esta funcionalidad.
- La gestión del riesgo cambiario es un proceso continuo y permanente de refinamiento. También requiere de pedagogía con el directorio, para que tenga un entendimiento profundo de la estrategia.
- Definir cómo se va a medir la efectividad de la estrategia de cobertura. Es importante entender que hay que mirar la “película completa”, es decir, como compensó el derivado a la partida cubierta. A partir de ello, se debe lograr explicar los resultados de la gestión de riesgo cambiario con claridad.
- Buscar que la gestión del riesgo cambiario tenga máxima coordinación con el área de compras y con el área comercial. Esto permite no sólo obtener información sobre las exposiciones en tiempo real, sino que también contribuye a que la gestión de riesgo cambiario ayude a incrementar las capacidades comerciales y competitivas de la empresa.
- Evaluar el riesgo de contraparte. Es importante tener en claro que no da lo mismo quién es la contraparte con la cual se cierra el derivado, ya que existe implícito un riesgo de crédito de ambas partes por la eventual compensación del derivado o su entrega física. Una buena práctica es operar con contrapartes con rating crediticio.