Ilse Orellana, tesorera de Küpfer, revela cómo Xymmetry se convirtió en una herramienta indispensable para la compra de divisas, la negociación con sus contrapartes y la toma de decisiones diarias de la compañía.
Para una empresa como Küpfer, con un alto volumen de importaciones, el acceso a información financiera precisa es clave. Su Tesorera, Ilse Orellana, ha integrado Xymmetry de tal forma en su operativa que la considera una extensión de su propio equipo.
Una herramienta imprescindible para la operación diaria
La jornada en la tesorería de Küpfer comienza y termina con Xymmetry. «Lo primero que hago es prenderlo, no me imagino hacer compras sin tener el dato de Xymmetry«, afirma Orellana. Esta conexión es total, al punto que asegura: «Trabajamos con esta pantalla, no operamos si no es con Xymmetry», dice y añade: “Son mis ojos para cotizar”.
El valor más tangible se refleja en el poder de negociación que les otorga. Les permite validar las cotizaciones de sus contrapartes y asegurar tasas más competitivas, generando un importante ahorro en cada operación. Pero el valor no es solo económico. «¿Qué es lo que más me gusta de Xymmetry? Que esté minuto a minuto el tipo de cambio actualizado. También las noticias», asevera.
Esta relación de confianza se ha construido sobre la base de un buen producto y un respaldo constante. «Siempre nos acompañaron», comenta Ilse, resumiendo una larga y positiva experiencia. La conclusión sobre el rol que juega Xymmetry en su día a día es la mejor definición de un caso de éxito: «Es mi mano derecha».

